¡Volví a tener 14!

Con un par. El sábado volví a tener 14 años y pude ir al concierto al que mi padre no me dejó ir debido a mi juventud y “porque no eran horas para que yo danzara por la calle para ir a ver un concierto”… ya ves tú.

A eso de las 9:30 llegamos a Ciudad Real, yo me fui con mis padres a ver el piso (¡¡que ya tengo pisito!!) mientras Alicia, Laura, Lourdes y Natalia se fueron a hacer cola para el concierto. Por lo visto ya había unas 20 personas allí. Yo llegué sobre las 12. Pero bueno, en definitiva yo estuve unas 9 horas en la cola, ellas estuvieron aún más… Como son buena gente me guardaron el sitio :P

La espera no fue muy larga, entre viajes a la gasolinera, bromas, comer, quemarnos hasta ponernos como cangrejos, nervios, gente que se cuela, empujones, después de pintarnos los brazos (ya lo he dicho… volvimos a los 14) a las 8:30 abrieron el recinto, nos registraron los bolsos y a correr que echan agua. Atravesamos el campo de prácticas de golf a toda leche y conseguimos sitio en primerísima fila…¡¡Qué vistas, por DioR!!

Nos pusimos a guarrear una camiseta para tirársela al escenario hasta que empezó el concierto de Lucas Masciano, el telonero. No lo conocía, pero fue genial. Me encantaron todas las canciones. Al poco, cuenta atrás y apareció (al fin) El Canto del Loco.

Me dejé la voz, me emocione sobretodo con las canciones “La suerte de mi vida” y “Una foto en blanco y negro”… Simplemente genial. Son estupendos en directo y siempre saben cómo sorprender a todos los que van a verles. Dani Martín salió con agua y nos echó para que pudiéramos refrescarnos un poco (¡qué majoso, oye!), pero la mejor parte se la llevó él, que se tiró un cubo enterito por encima. Saqué fotazas y fue genial eso de no tener a nadie que te ponga la cabeza delante y que no te deje ver o que impida sacar fotos, a pesar de los empujones de la cabrona que tenía atrás. Todavía me dura la emoción. [mode catorceañera] Dani Martín me miró… ¡¡Y tengo pruebas!![/mode catorceañera off]

Al final del concierto pasamos por el puestecico y me agencié el vinilo firmado (aunque no tengo tocadiscos pero, ¡qué cojones! Me hacía ilusión) y unas chapas la mar de monas. Y nos vinimos a casa con un buen sabor de boca y un cansancio increíble… No aguantamos hasta el domingo y al poco fue el padre de Alicia en coche a por nosotras… Empiezo a pensar que estamos un poco viejunas ya.

Las cosas… van

Después de mucha confusión, mucha prisa y muchos nervios, las cosas van más relajadas. Ya tengo compañera para el piso, una chica que estudia informática con Alicia y para empezar me ha caído genial. El sábado por la mañana voy a Ciudad Real a ver el piso antes de empezar a hacer cola para el concierto.

Tanto cambio me asusta un poco, la verdad, me voy a vivir a otro sitio, con otra gente… Todo cambiará casi de la noche a la mañana, creo que es normal que esté un poco acongojada, ¿no?

Las próximas semanas no parecen pintar del todo mal, este sábado nos vamos a Ciudad Real al concierto de El Canto del Loco, vendremos el domingo casi a mediodía… y ya os contaré. La semana que viene toca piscina (yeeah!) y a la siguiente nuevo viaje a Madrid a Sé lo que hicisteis… Tanto me gustó que antes de que terminase el programa ya tenía ganas de volver y al parecer he hecho que a unos cuantos también les entre el gusanillo y se apunten.

A partir de ahí pues algo de feria, que habrá que ir, digo yo y a “disfrutar” de los conciertos que nuestro señor alcalde ha contratado para este año como Kiko y Shara… ¡eso es una fiesta y lo demás son tontás! (nótese la ironía)

Por no dejar esto así de soso os dejo una canción del ECDL, La suerte de mi vida, que es una de las que más me gustan del último disco.